martes, 8 de enero de 2013

Metástasis cutánea solitaria de carcinoma vesical


Introducción

Las metástasis cutáneas cuyo origen son los carcinomas de células transicionales son muy infrecuentes. Pocos casos se han descrito en la literatura. Representan una diseminación importante de la enfermedad, generalmente en casos muy avanzados, y se asocia un pronóstico muy desfavorable. El urólogo que realiza el seguimiento de los pacientes oncológicos debe conocer estas lesiones y coordinar el tratamiento de estos pacientes.

Caso clínico

Se trata de un paciente varón de 79 años de edad, con antecedentes de prostatotomía derecha más uretrotomía endoscópica y hemilaringectomía izquierda. Ingresa procedente de Urgencias por hematuria, se realizan estudios complementarios (urografías –UIV- y cistoscopia) en los que se evidencia unicamente lesión de aspecto papilar, exofítico en cara lateral izquierda y fondo vesical. 

Se realiza resección transuretral (RTU) de dicha lesión con diagnostico anatomopatológico (AP) de Carcinoma urotelial de alto grado sin infiltración de la muscular (T1G3), siendo incluido en el protocolo de ciclos de lavados vesicales con BCG. A los 6 meses reingresa por hematuria, presentando en UIV ureterohidronefrosis izquierda y defecto de repleción vesical y, en cistoscopia lesión de aspecto sólido en cara lateral izquierda por lo que se realiza RTU y meatotomía ureteral izquierda con diagnóstico AP de carcinoma urotelial de alto grado con infiltración muscular (T2G3). 

En controles sucesivos (UIV) presenta nuevamente ureterohidronefrosis izquierda con afilamiento brusco del uréter distal por lo que se realiza Punción renal percutánea (PPT) + pielografía descendente + Colocación de catéter doble J izquierdo; se deja colocada nefrostomía percutánea izquierda por sangrado para realizar lavados retirándose a los 5 días sin complicaciones. 

El catéter doble J se retira a los 3 meses y sin evidencia de recidiva de la enfermedad en mucosa vesical. El paciente fue enviado para recibir tratamiento paliativo con radioterapia externa; dicho tratamiento se suspende al detectar en Tomografia Computarizada (TC) la aparición de nódulos y microC. Muller Arteaga, S. Martín Martín, C. de Castro Olmedo y cols. 1.216 nódulos pulmonares, lesión subcapsular hepática de 1 cm. de diámetro, destrucción del cuerpo vertebral de L2 y adenopatías retroperitoneales todo ello compatible con metástasis. Además, se evidencia lesión cutánea en región lumbar izquierda (coincidiendo con la zona de la PPT realizada) de aproximadamente 6 cm. de diámetro, ulcerada, con fácil sangrado al roce, de superficie lisa, consistencia aumentada, no fluctuante, que invade tejido subcutáneo y cuya biopsia demuestra sustitución de dermis y epidermis por proliferación tumoral densa y sólida con múltiples nidos sólidos e irregulares separados por tejido conectivo y concluye infiltración de carcinoma de origen vesical. Posteriormente el paciente presenta deterioro progresivo y fallece con una sobrevida aproximada de 12 meses posterior al diagnóstico inicial y de 3 meses desde la aparición de la lesión cutánea.